Los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía realizaron una visita de amistad y trabajo a México. Además de estrechar las buenas relaciones que a nivel personal e institucional ya mantenían con el presidente Carlos Salinas de Gortari, se trataba de estudiar la forma de potenciar las cumbres iberoamericanas.
Sus Majestades llegaron a Huatulco, donde esa noche asistieron a una cena junto a la playa con todos los miembros de la Casa Real y con el embajador de España, Juan Pablo de la Iglesia.
Pese al carácter privado de la visita, el programa incluyó un encuentro con prominentes hombres de negocios mexicanos y españoles con intereses comunes en los dos países, celebrado durante un almuerzo en la residencia presidencial de los Pinos en la capital mexicana.
Otro acto destacado fue la asistencia de los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía y Salinas de Gortari, en la ciudad de Oaxaca de Juárez, a una de las manifestaciones más importantes y más auténticas de la etnias indígenas mexicanas: la fiesta de la Guelaguetza.