DON JUAN CARLOS DESFILÓ CON LA ANCESTRAL ORDEN DE LA JARRETERA

17 JUNIO 2002

Don Juan Carlos y doña Sofía asistieron, junto al resto de los monarcas europeos, a las solemnes celebraciones del Jubileo de la reina Isabel II de Inglaterra organizadas para las distintas Casas Reales.

Los solemnes actos comenzaron con la ceremonia anual de la Orden de la Jarretera, la orden de caballería más antigua del Reino Unido – fundada en 1348 por el rey Eduardo III- y de la que don Juan Carlos fue nombrado ‘caballero extra’ en junio de 1989. En esta ocasión, la reina Isabel invistió caballero al rey Harald, del que es prima en segundo grado, y que se convirtió así en el quinto monarca europeo al que le es otorgado tal honor -junto a Harald y don Juan Carlos son ‘caballeros extra’ la reina Beatriz de Holanda, la reina Margarita de Dinamarca y el Gran Duque Juan de Luxemburgo.

Los Reyes de España y los de Noruega llegaron a la capilla San Jorge del Castillo de Windsor, donde se reúne tradicionalmente la citada orden, en el mismo coche de caballos descubierto. Don Juan Carlos, al igual que los otros caballeros – también forman parte de la Orden el duque de Edimburgo, el príncipe de Gales, la princesa Ana, el duque de Kent, el duque de Gloucester y la baronesa Thatcher, entre otros- lucía el atuendo propio de la Orden de la Jarretera.

La ceremonia de la orden de caballería ha sido el primero de los actos programados por la Casa Real británica para la celebración del Jubileo con los monarcas europeos. Esa misma noche, y también en Windsor, la Reina Isabel ofreció una cena de gala para agasajar a sus ilustres invitados en la celebración de su llegada al Trono. La gala tuvo lugar en la sala Waterloo, creada por el Rey Jorge IV para conmemorar la victoria de Wellington, en la que las tropas británicas vencieron al ejército de Napoleón. A la espléndida velada, asistieron ochenta invitados y estuvieron presentes todos los monarcas europeos.

Los Reyes de Suecia, Carlos y Silvia, los monarcas de los belgas, Alberto y Paola, y los actuales soberanos de Luxemburgo, Enrique y María Teresa, se unieron así a los festejos del 50º aniversario de la llegada de la soberana británica al Trono.