Los Reyes de España llegan esta tarde a Buenos Aires para celebrar su primer encuentro con la Argentina democrática. Las colonias de españoles en Buenos Aires y Rosario -las dos ciudades que visitarán don Juan Carlos y doña Sofía- preparan calurosos recibimientos, en pintoresca competencia con los realizados por la colonia italiana hace un mes, cuando el presidente Sandro Pertini viajó a ese país. Durante su estancia en Buenos Aires, los Reyes tienen previsto mantener un encuentro con las familias de los españoles desaparecidos durante la dictadura militar.

Éste será el segundo viaje oficial que los Reyes realicen a Argentina: el anterior tuvo lugar en noviembre de 1978, y fue rodeado de una gran polémica, ya que el PSOE -entonces en la oposición- mostró su desagrado ante la posibilidad de que la visita pudiera ser interpretada de alguna manera como un respaldo de España a la dictadura militar que por entonces gobernaba ese país. Posteriormente, en junio de 1980, la reina Sofía volvió a la capital argentina para asistir a los actos conmemorativos del cuarto centenario de la fundación de la ciudad de Buenos Aires. El viaje que se inicia hoy tiene un carácter muy diferente al de los anteriores: superados ya los obstáculos y recelos que para las relaciones hispano-argentinas suponía la existencia en ese país suramericano de una dictadura que comenzó casi simultáneamente con la restauración democrática en España, esta nueva visita servirá, en cambio, para subrayar la identidad política entre ambos países.

Viaje retrasado

La llegada de los Reyes a Buenos Aires se produce casi 16 meses después de que unas elecciones libres situaran en el poder al dirigente radical Raúl Alfonsín, tras siete años de dictadura. El viaje, previsto desde la restauración de la democracia argentina, sufrió diversos retrasos durante el último año, ya que en un principio estaba previsto que la gira real incluyera además de Argentina otra etapa en Bolivia, pero la inestabilidad política en este segundo país motivó diversos aplazamientos. Finalmente, el desplazamiento de los Reyes a Bolivia ha sido dejado para mejor ocasión. Los Reyes -que viajan acompañados del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán- llegarán esta tarde al aeropuerto de Eceiza, en donde dejarán el DC-8 de las Fuerzas Aéreas españolas en el que viajaron desde Madrid para tomar un avión de las fuerzas aéreas argentinas que les conducirá al Aeroparque, aeropuerto situado en el centro de la ciudad. Allí, a las 17.15, serán recibidos oficialmente y mantendrán su primer contacto con la población de la ciudad de Buenos Aires.

Mañana, los Reyes realizarán a las 10.30 el primer acto de su visita oficial, haciendo una ofrenda floral ante la estatua del general libertador San Martín. De ahí marcharán a la Casa Rosada, sede de la Presidencia de la República, donde el Monarca español se entrevistará con Raúl Alfonsín. En ese mismo lugar, los embajadores acreditados en Buenos Aires saludarán a don Juan Carlos y a doña Sofía.

Tras un almuerzo en privado con Raúl Alfonsín, los Reyes descubrirán una estatua dedicada al rey Carlos III y asistirán, ya por la noche, a la cena oficial que el presidente de la República y su esposa les ofrecerán en el palacio de Errázuriz.

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El martes por la mañana, en la Embajada de España, el Rey se encontrará con familiares de los desaparecidos españoles. Durante su anterior estancia, en 1978, el Rey intercedió ya por los desaparecidos ante el Gobierno militar que entonces dirigía el país y se entrevistó con los más significados líderes de la oposición democrática.

En la misma Embajada de España, el martes, don Juan Carlos recibirá, de manos del intendente (alcalde) de Buenos Aires los títulos de propiedad de los terrenos del Colegio Español. A mediodía, en la universidad de Belgrano, don Juan Carlos será investido doctor honoris causa en Humanidades. Por la tarde tendrá lugar un acto parlamentario en la Asamblea Legislativa, y por la noche, los Reyes ofrecerán en un hotel una recepción a Raúl Alfonsín y a su esposa.

Visita a Rosario

El miércoles, en la Sociedad Rural, los Reyes recibirán a la colonia española en Buenos Aires, y ya por la tarde -acompañados del presidente argentino y su esposa-, se desplazarán a la ciudad de Rosario, donde, por parte de la colonia española, se espera el más espectacular recibimiento popular del viaje. Don Juan Carlos recibirá la llave de la ciudad de Rosario, descubrirá una placa en el complejo cultural Parque España y asistirá a un espectáculo de danzas folclóricas. Posteriormente, el Monarca rendirá homenaje a la bandera argentina, mientras Alfonsín hará lo propio con la enseña española. La visita a Rosario -que es la primera visita oficial que los Reyes harán a una ciudad argentina distinta de la capital- concluirá con discursos de Alfonsín y don Juan Carlos, regresando posteriormente todos ellos, ya de noche, a Buenos Aires.

El jueves, en Aeroparque, los Reyes serán despedidos oficialmente por Raúl Alfonsín y su esposa, realizando, de regreso a Madrid, una escala en Iguazú, en donde visitarán las cataratas que se encuentran en las cercanías de esta ciudad.