En la primera visita de los Reyes a Argelia en 24 años, Don Juan Carlos dijo ayer en Argel, ante el presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, que es importante encontrar una solución política «justa, duradera y mútuamente aceptable» para el Sahara Occidental «como ha puesto recientemente de relieve mi gobierno» y que pase por la «libre determinación».
«Una solución a la que debe llegarse a través del diálogo entre las partes y en el marco de Naciones Unidas», añadió.
Don Juan Carlos pronunció estas palabras en la comida que el presidente argelino ofreció a los Reyes al inicio de su segunda visita de Estado al país magrebí.
Moratinos piensa lo mismo
Las palabras del monarca se anticiparon a las del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, quien también afirmó ayer que existe una «coincidencia plena» entre España y Argelia sobre la cuestión del Sáhara Occidental, en especial, a la hora de rechazar cualquier «propuesta o acción unilateral» con la que se pretenda resolver el contencioso.
Moratinos, en declaraciones a los periodistas durante la visita de los Reyes a Argelia, subrayó que ambos países defienden la reanudación de las conversaciones entre Marruecos y el Frente Polisario para hallar una solución definitiva en el marco de la ONU que reconozca el derecho de autodeterminación de los saharauis.
Según Moratinos, España no ha cambiado de postura en este asunto después de que en la cumbre con Marruecos celebrada los pasados días 5 y 6 en Rabat, el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, viera con buenos ojos el plan marroquí como base para reactivar el diálogo.
Moratinos explicó que Marruecos está en su derecho de hacer una propuesta y el Frente Polisario, a «aceptarla, negociarla o rechazarla».
Moratinos se refirió también a si España sigue defendiendo que el proceso del Sáhara incluya la celebración de una consulta entre los saharauis, cuestión que, según explicó, no se trató en la reunión del Rey con Bouteflika.
España no excluye esta posibilidad porque, «incluso, los marroquíes hablan» de ella, comentó el titular de Exteriores
Castigados con una subida del gas
La visita de los reyes se produce en un momento en el cual el Gobierno norteafricano ha decidido aumentar el precio del gas que le vende a España, en lo que analistas han interpretado como una represalia al apoyo dado al plan marroquí sobre el futuro del Sahara Occidental.
Asimismo, el aumento del gas argelino se enmarca dentro de la tendencia de países en desarrollo a dar más valor a los recursos naturales que les venden a las naciones del ‘primer mundo’, como es el caso de Bolivia y Venezuela.
Argelia es el principal proveedor de gas natural a España.
La balanza comercial es deficitaria para los intereses españoles, puesto que las importaciones ascendieron en 2006 a 451 millones de euros, mientras que las exportaciones apenas superaron los 120 millones, según cifras del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El ministro argelino de Energía y Minas, Chakib Jelil, dijo el lunes que el país quiere subir los precios del gas que vende a Gas Natural, uno de los principales operadores de España.
Jelil dijo a la radio estatal argelina que quiere que los precios crezcan en aproximadamente en un dólar por millón de BTU (British Thermal Unit) y que la subida se aplicaría a los contratos del gas que suministra la empresa estatal argelina Sonatrach a Gas Natural a través del gasoducto del Magreb.
En la actualidad Argelia exporta por esa obra, a España y Portugal, unos 12.000 millones de metros cúbicos anuales que el año pasado representaron una factura de 650 millones de dólares.
El ministro argelino indicó que el deseo de Sonatrach es elevar los precios del gas natural «a un nivel razonable con fórmulas que puedan ser revisadas en el futuro» y que tengan en cuenta el arco de precios existente en el mercado internacional.
