La Reina, por encontrarse indispuesta, no ha acompañado al Rey a Malta en la visita de Estado que ha comenzado en el archipiélago mediterráneo, han informado fuentes del Palacio de la Zarzuela. Una portavoz de Casa Real ha asegurado que Su Majestad no está contagiada de la gripe A «en absoluto».
El Rey llegó a primera hora de la tarde a Malta, en la que es la primera visita de Estado de un monarca español a este archipiélago mediterráneo, con el que se tienen unas excelentes relaciones que se quieren ampliar, con especial atención a las económicas.
El avión de la Fuerza Aérea española en el que Don Juan Carlos viajó desde Madrid aterrizó en el aeropuerto internacional de Gudja poco antes de las 16,30 horas. De los 27 países de la Unión Europea, al Rey ya sólo le falta Chipre por visitar.
Nada más poner pie en tierra, el rey fue recibido por el presidente maltés, el laborista George Abela, y el ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos, que se desplazó a Malta desde Arabia Saudí, en donde estuvo acompañando al presidente del ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero.
Tras los honores de ordenanza, Abela presentó a don Juan Carlos al primer ministro, Lawrence Gonzi, y a otros miembros del Ejecutivo maltés y, a continuación, los dos jefes de Estado saludaron a las delegaciones de los dos países.
Esta tarde, el Rey recibirá en la capital, La Valeta, a la colonia española residente en Malta, un archipiélago en el que habitan poco más de 400.000 personas en menos de 300 kilómetros cuadrados, y que durante casi dos siglos perteneció a la Corona de Aragón y a la de España.
Por la noche, Abela ofrecerá a don Juan Carlos una cena de gala en el Palacio Presidencial, quien mañana mantendrá reuniones al más alto nivel.
Los Reyes tuvieron que aplazar el lunes otro viaje oficial a Túnez que iban a realizar entre ayer y hoy debido a que el presidente de este país magrebí, Zine el Abidine Ben Ali, padecía una «inflamación aguda de faringe» que le obligaba a mantener cinco días de reposo, según explicó un portavoz de la Presidencia tunecina. Sin embargo, algunos medios de comunicación españoles comentaron que Ben Ali, de 72 años, había contraído la gripe A y citaban a una fuente diplomática europea.
