Los Reyes de España han llegado a Shanghai en una visita de Estado de cinco días para incentivar las relaciones con China, que, con más de 1.385 millones de habitantes, abre un mundo de posibilidades para todo lo que puede ofrecer y recibir España.
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El avión de la Fuerza Aérea española ha aterrizado en el aeropuerto de Homgqiao poco después de las 20,30 (hora local), y, aunque el recibimiento con honores por parte del presidente Hu Jintao será el miércoles en Pekín, autoridades chinas y el embajador de España en Pekín, Carlos Blasco, les han recibido en el aeropuerto.
Siguiendo una tradición local, nada más descender del avión, dos niños han ofrecido flores a Juan Carlos y Sofía, que mañana iniciaran una agenda con más de 20 actos en Shanghái, Pekín y la capital de Sichaun, Chengdu.
